¡Mira que me pongo negra!

6.45 pi pi pi PIIII pi pi pi PIIII madrugón para ir a la uni incluyendo posible pérdida. Tras ir comentando todas las tiendas que encontrábamos por el camino y cruzarnos a muchos niños equipados mas bien para un cursillo de esquí que para ir al colegio llegamos a la estación.

Como todo buen Español al no haber torniquetes entramos sin pagar; " como no sabemos donde se compran los billetes...." llegamos a la universidad. Por fin conocemos a nuestro tutor y a nuestro "welcome buddy" y a varios tíos que se llamaban Tom y todos eran muy majos.

Con la gran noticia de que el lunes tenemos que estar alli a las 8.30 de la mañana (recordamos para lectores despistados que vivimos en la otra punta) para ir a Kiel, nos dejaron explorar la universidad. Lo que hicimos fue ir a ver todos los anuncios de la universidad a ver si vendían un microondas o nos ofertaban un nuevo lugar donde vivir...

Decidimos ir a la estación central para explorar el centro con tan buena suerte que al llegar empezó a nevar tan fuerte que decidimos pasar el resto de la mañana en Ikea. Ahora viene lo bonito....

Volvemos a entrar sin billete porque como los Alemanes son tan responsables seguro que no hay revisores.... ZAS en toda la boca! según se pone el tren en marcha un señor empieza a hablar en Alemán en el pasillo y enseña una tarjeta, mala señal.....

Se acerca y pregunta si tenemos el billete a lo que decimos que no entendemos nada y sabemos muy poco Inglés. El asunto de ser tontas no cuela y nos intenta cobrar una multaza de 40 pavos a lo que respondemos: -4????? 

-NEIN 40! 

-14??????

-40!!!!

Quien no hace caso a un NEIN enfadado!! 

Despues de buscar muchas justificaciones....("en realidad solo hemos perdido 31 euros porque total ya nos hemos colado 3 veces...") llegamos a Ikea gracias a uno de sus trabajadores.

ARRASAMOSSSSS que si velita aromatica, espejito, perchita, cestito, pegatinitas, relojito.....acabamos agotadas con lo que decidimos comer en el restaurante. ¡Pero en qué piensan los de Ikea no dejando entrar al restaurante con todo pagado!!! con lo que nos tuvieron que abrir la salida con el respectivo chequeo de ticket y objetos. Así que optamos por lo barato perrito y bebida por 1,5 euros que después de pagar 40 euros por un billete de metro no estamos para más. 

Tuvimos un feliz regreso cargando con dos super bolsas de cosas y una gran ventisca pero esto no acabó con nosotras.

Después de pasar 2 horas como diseñadoras de interiores conocimos a otro de nuestros compañeros de piso autistas. ¡Qué majos ellos!

Vamos a seguir con nuestras super cervezas alemanas mientras vemos una peli que no estamos para salir. Os dejamos algunas fotillos de hoy!

Gamusibesos para todos!