6 en casa

Sábado

Sábado de Rosa:

Amaneció un día soleado, con lo que a las 8 ya estaba en marcha a pesar de que tenía todo el tiempo del mundo para dormir... Recogí mi habitación porque a la 1 llegaban mis padres y no pueden ver la leonera en la que vivio sino en una preciosa habitación de señorita.

A las 10 había quedado con Germán para ir a correr y ayudarle a bajar sus botellas reciclables que había demasiadas. Llegué pero el no respondía a la puerta asique me volví a casa muy dolida por el plantón =( Cuando estaba a punto de salir del edificio me encontré con él que había ido a ayudar a Elke con la mudanza. Bajamos toda la mierda de su cocina, incluida la basura, que nos llevó 2 viajes a pesar de la fuerza de Germán jajaja

Cuando tocaba correr empezó a nevar y decidimos que era mejor dejarlo para otro día asi que llevamos uno de sus colcones a mi habita para cuando viniesen mis padres y bajamos al "gimnasio" un ratito.

Había quedado con Jorge para hablar por skype, (un gamusibeso para él ;) y a la 1 o así llegaron mis padres. Nada más llegar dejaron las maletas y nos fuimos de excursión a Ikea. Por fin compré una cortina para poder dormir!!!! Al volver a casa estaban Cris y sus papis de vuelta y nos fuimos todos juntos.

Sábado de Cris:

Nos despertamos a las 8 de la mañana y salimos con rumbo a Hannover. Llegamos y nos hicimos con un plano turístico y empezamos a recorrer la ciudad. Fuimos al Rathaus, que era un edificio enorme y precioso e intentamos subir arriba del todo de la cúpula, cosa que no nos dejaron por razones climatológicas, ya que estaba nevando y no querían tener esculturas de hielo en su hermoso edificio. Después de esto fuimos a recorrer el jardín y el lago que lo rodeaba y descubrimos que la nieve no era nieve sino bolitas porexpán. Estaba bolinizando jejeje.  

Continuamos la visita, por la zona del río y del casco antiguo cuando nos dimos cuenta de que por toda la ciudad había pintada una raya roja, que es la que tenían que seguir los turistas para no perder detalle de la ciudad. (nosotros pensábamos que era el carril bici). 

Volvimos a coger el coche y nos fuimos a visitar unos jardines de un palacio. Cuando llegamos empezó a nevar fuerte, nos resguardamos debajo de la puerta del palacio mientras comíamos una manzana, pero al ver que no paraba, decidimos continuar y comer manzana con nieve que está mucho más rica. Dimos una vuelta por todo y salimos a un puestecito a comer una salchicha. De ahí fuimos a ver la otra parte de los jardines que estaban cruzando la calle. Eran unos invernaderos con plantas tropicales, entramos y parecía el paraiso que calentito, que humedad, que bien y solo estaban a 15 grados! Después de dar más vueltas por los alrededores y cruzarnos con mil ardillas rojas nos volvimos para casa. 

Como no, me eche una super siesta en el coche :)

Sábado de las dos:

Después de que nuestros padres se conociera, cojimos el tren para ir al centro a pesar de los dos coches de los que disponíamos jaja
Montamos en el tren sin estar muy seguras del billete que habíamos comprado para nuestros padres y con esa suerte que caracteriza a Rostina, vino un revisor nada más montarnos! jajaja
Estaba todo en orden y llegamos bien al restaurante. Gracias a dios que Jorge había llamado para reservar sitio y carnaza en Gröninger!

Tuvimos una velada estupenda y por fin Rosa tenía su cámara de fotos para inmortalizar el momento. Un alcohólico nos alegró la noche con un acordeón tocando unas baladas españolas para que nuestros padres pudiesen cantar con él jaja

Fuimos a recorrer la calle de Reeperban y acabamos en una super feria que se llama Dom y tiene dos montañas rusas, millones de puestos de comida, una atracción de agua y que no era sobre hielo.
Después del paseo nocturno, nos volvimos los 6 a casita. Volvimos a ir a casa de Germán para ser originales, hicimos noche de cocktail y acabamos en nuestra casa degustando los manjares españoles que nos habían traido nuestros padres.

Como ese día cambiaban la hora, nos acostamos a las 3.

Gamusibesos